domingo, 29 de septiembre de 2013

Dependiendo de Dios

No habrá para qué peleéis vosotros en este caso; paraos, estad quietos, y ved la salvación de Jehová con vosotros. Oh Judá y Jerusalén, no temáis ni desmayéis; salid mañana contra ellos, porque Jehová estará con vosotros.
2 Crónicas 20:17

Generalmente el ser humano trata de desarollar un sentido de autonomía, ver de independencia. Si un padre o una madre está demasiado atento a su hijo, la sociedad lo trata de padre o madre gallina y que le niño necesita ser independiente. Sin embargo, cuando vemos las escrituras, el hombre fue creado por Dios para ser un ser dependiente, somos dependientes de Dios.


Depender es estar bajo el mando o la autoridad de una persona, también es necesitar el auxilio o la ayuda de alguien mas. La persona dependiente se somete, obedece, acata ordenes. Cuando una persona desea ser independiente se necesita revelarse contra la autoridad establecida y dice: que nadie se meta en mi vida, porque en mi vida mando yo. Que triste porque fuimos creados para ser dependientes.

El humano vive rodeado de necesidades que no puede staisfacer con sus propias fuerzas. Hay situaciones que uno quiere actuar con sus propias fuerzas, confiar en nostros mismo o mismo con nuestra propia inteligencia. Un adicto a las drogas o al alcohol, aunque diga que comienza y termina cuando quiere, la verdad es que poco a poco las cadenas van desarrollandose de manera en que se es dificíl luego salir. Poco a poco se va posesionando las fuerzas y la voluntad del hombre. Por eso, aunque decimos hasta aquí fallo, seguimos en las mismas prácticas. Hay un peso espiritual sobre nosotros que nos domina.

No se deleita Jehová en las fuerzas del hombre dice el salmista, sino que se deleita Jehová en los que le temen, en aquellos que han aprendido su dependencia a Dios. Confía en Dios. Por eso las escrituras remarcan que es maldito el hombre que confía en otro hombre. Si tu logras vencer la tentación es porque eres dependiente de Dios, porque su Espíritu está sobre tí. Las fuerzas humanas no son suficientes para vencer la naturaleza caída que heredamos de Adán.

El humano tiene tres grandes enemigos. La carne, esa tendencia de hacer lo malo, esos deseos malhonestos que heredamos de Adán. Sin Dios, es dificil retener tu lengua y todo tu cuerpo para no pecar. En segunda instancia está el mundo. Las Santas escrituras registran que estamos en este mundo pero no somos de este mundo. La sociedad está haciendo presión sobre nosotros para quitar de nosotros esa dependencia de Dios, al ser tentados con todas las ofertas que te hacen sentir independientes y sin necesidad de Dios. Finalmente está Satanás quién detesta la imágen de Dios en nuestras vidas.

El Dios de nosotros no cambia en su propósito. Es inmuable. Siempre Dios está pendiente de nuestras necesidades como hemos estado hablando las semanas anteriores.

El día de hoy tomaremos la historia de uno de los mejores reyes de Israel, el rey Josafat. En este relato habían tres enemigos que se levantarón con el pueblo de Dios. Los hijos de Amón, los hijos de Moab y los hijos del monte de Seir. Aunque Josafat contaba con hombres diestros en el arte de la guerra, Josafat nos da una grande lección.

Josafat y el pueblo bajo amenza
20 Pasadas estas cosas, aconteció que los hijos de Moab y de Amón, y con ellos otros de los amonitas, vinieron contra Josafat a la guerra. 
2Y acudieron algunos y dieron aviso a Josafat, diciendo: Contra ti viene una gran multitud del otro lado del mar, y de Siria; y he aquí están en Hazezon-tamar, que es En-gadi. 
2 Crónicas 20:1-2 

En el capitulo 20 de segunda de Crónicas, se registra que como todo humano el pueblo se llenó de temor. Este sentimiento es natural en el hombre. Muchos pretendemos ser valientes y por actuar a nuestra manera, a nuestro tiempo, en nuestra sabiduría y por eso cometemos errores. Josafat, aunque tuvo temor, hizo lo que todos deberíamos hacer frente a la prueba, muestra su dependencia de Dios.

Le dependencia de Josafat a Dios se maniesta al
    Humillar su rostro 
    Reconocer nuestros errores, dejar los malos caminos, los malos hábitos, todas esas costumbres que están corrompiendo tu vida espiritual y que la nueva teología busca en decir que eso no es nada. Un poco de levadura leuda toda la masa. Josafat se humilló. El conocía el secreto ya establecido en el libro de las Crónicas:
14 si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra. 
2 Crónicas 7:14 

    Consultar al Señor 
    Andamos buscando consejos que vengan a satisfacer nuestros deseos y a reconfortar nuestra idea ya hecha, pero muy pocos consultamos a Dios. Josafat, aunque contaba de grandes estragas y consejeros como todo Rey, no solo se humilló, sino que consultó a Dios.
3 Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces. 
Jeremías 33:3 

Clama a Dios. Da voces, consulta a Dios. No busquemos dirección fuera de Dios. Pídele su guianza, su protección, porque el Espíritu Santo no se equivoca. Cuando te mete en un camino es porque sabe que tendrás victoria. Porque hay caminos que al hombre le parecen rectos, pero su fin son caminos de muerte. Si le consultas, si clamas a Él, Dios te responde. Y cuando responde, responde bueno. Te va a contestar para bendecirte, cuando te entregue algo, podrás alabar, podrás gozar de libertad y gozo, porque su bendición no añade tristeza con ella.
    Declarar ayuno y oración 
    Hoy se ha menospreciado ese grande arma poderosa. Ponemos mil y una excusa para no ayunar. Es como nosotros tratar de tomar la mano de Dios, pero nuestras fuerzas se debilitan. Por ello es de dejar que Dios nos tome de su mano, porque el que está en su mano nadie lo arrebatará. Como sedeja que Dios nos tome en su mano? Jesús nos da el secreto en Mateo:
41 Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está dispuesto, pero la carne es débil. 
Mateo 26:41 

El caer en la tentación muchas veces en provocado por las necesidades. Un hombre o una mujer insatisfechos en la intimidad buscará ir a saciarse en otro lugar. Un hombre con hambre está tentado a robar o ha hacer cualquier locura, para satisfacer su necesidad. Dios pide un grupo de valientes que puedan comportarse como lo que son: Hijos de Dios. Es que en medio de esas necesidades humanas, donde la carne es débil, es de venir postrados y humillados ante Dios. Debemos velar y orar en todo tiempo, porque es con las fuerzas del todopoderoso que venceremos toda tentación.

En vez de consultar a Dios, vamos donde otros consejeros y revelamos todas nuestras necesidades, nuestras debilidades y hay uno que manda emisiarios que están atentos para que en base a nuestras necesidades y debilidades que hemos confesado seamos bombardeados de tentaciones.

Pero cuando tu consultas a Dios, cuando nos humillamos y buscamos el rostro de Dios y mostramos nuestra depencia a Dios por medio del ayuno y la oración, Jehová responde.
El Señor responde 
14 Y estaba allí Jahaziel hijo de Zacarías, hijo de Benaía, hijo de Jeiel, hijo de Matanías, levita de los hijos de Asaf, sobre el cual vino el Espíritu de Jehová en medio de la reunión; 
15 y dijo: Oíd, Judá todo, y vosotros moradores de Jerusalén, y tú, rey Josafat. Jehová os dice así: No temáis ni os amedrentéis delante de esta multitud tan grande, porque no es vuestra la guerra, sino de Dios. 
2 Crónicas 20:14-15

Luego de consultar, de humillarnos, de ayunar y orar, es tiempo de escuchar, de oír. Esa dulce voz que te dice, no temas, no tengas miedo, no te debilites, porque no es vuestra la guerra, sino de Dios. Esta guerra es espiritual y nuestros ojos humanos no ven lo que Dios ve. Esta guerra se ha lanzado para destruir la corona de la creación y el enemigo está para destruir el propósito de Dios en tu vida, ha tendido un lazo, ha hecho una emboscada, que al ser no dependientes de Dios, somos presa facil. Pero cuando dependemos de Dios, Dios peleará la batalla por nosotros. Él defiende lo que es suyo. Se puede levantar el mundo contra tí, pero si eres pertenencia de Cristo, Él peleará por ti.

El Señor viene a través de su palabra como un ungüento, como un bálsamo que te reconforta, te alienta, te da nuevas fuerzas, te levantas las manos caídas, levanta tu cabeza y comienzas a poner tus ojos en jesús el autor y consumador de la fe, mantendiendo como viendo al invisible. Sana y hecha fuera el temor, quita el desánimo. El no está ni adelante, ni atrás, sino que el ángel de Jehová acampa alrededor de los que le temen.

Dios quiere que dependamos de Él 
Ha llegado el tiempo que en este afán de todos los días, debemos detenernos, poner un pare. En tu necesidad parate, deja de correr, deja que Él haga las cosas por tí. Párate, quedate quieto, porque la salvación es de Jehová.

17 No habrá para qué peleéis vosotros en este caso; paraos, estad quietos, y ved la salvación de Jehová con vosotros. Oh Judá y Jerusalén, no temáis ni desmayéis; salid mañana contra ellos, porque Jehová estará con vosotros. 
2 Crónicas 20:17 

Debemos de actuar como hijos de Dios, no como hacen los que no conocen al abogado por excelencia, al médico por sobre todos los médicos, al que suple y provee. Depender habíamos dicho que implicaba la obediencia, si Él manda que nos quedemos quietos, que nos paremos, con actitud pronta debemos responder a su orden. Y hasta alí veremos la mano poderosa de nuestro Dios obrar a nuestro favor. Dios quiere que en tu lucha, veas la manifestación de su gloria, veas su mano obrando por tí, que no metas mano, que no busques en responder tú, sino que la respuesta venga del Cielo.

¿Entonces si no puedo meter mi mano, que debo hacer? Tu papel en esta guerra es adorar y alabar 
18 Entonces Josafat se inclinó rostro a tierra, y asimismo todo Judá y los moradores de Jerusalén se postraron delante de Jehová, y adoraron a Jehová. 
19 Y se levantaron los levitas de los hijos de Coat y de los hijos de Coré, para alabar a Jehová el Dios de Israel con fuerte y alta voz. 
2 Crónicas 20:18-19 

Cuando te das cuenta que tienes un Dios tan grande, tan fuerte, no puedes hacer otra cosa que adorar, adorar y adorar, con voz fuerte, con voz de júbilo, con voz que expresen fuertemente cuan agradecidos estamos con el soberano Rey y Señor, quién nos vistió de poder. Glorificad a Jehová porque su misericordia es para siempre. El está contigo en medio de tu necesidad, para levantarte, para sostenerte, para darte la victoria, para mostrarte el poder natural de su amor por tí.

21 Y habido consejo con el pueblo, puso a algunos que cantasen y alabasen a Jehová, vestidos de ornamentos sagrados, mientras salía la gente armada, y que dijesen: Glorificad a Jehová, porque su misericordia es para siempre. 
2 Crónicas 20:21 

¿Cual fue el resultado?
22 Y cuando comenzaron a entonar cantos de alabanza, Jehová puso contra los hijos de Amón, de Moab y del monte de Seir, las emboscadas de ellos mismos que venían contra Judá, y se mataron los unos a los otros. 
2 Crónicas 20:22 

Si dependes de Dios, Él peleará por tí 



domingo, 22 de septiembre de 2013

Despojándonos de todo afán

25 Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?
33 Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.
Mateo 6:25-33

Uno de los temas centrales del mensaje de Cristo ha sido el establecimiento de su reino en la tierra. Cuando hablamos de reino, hablamos de un nuevo orden de gobierno. Este reino tiene como primicia la felicidad de cada uno de los que pertenecen a ese reino. Cuando entras bajo el gobierno de Cristo, independientemente de cualquier circunstancia hay alegría, contentamiento, de felicidad plena. Un reino donde cada uno es siempre bendecido porque la presencia de Dios está en nuestra vida.

Uno de los obstáculos mas grandes para disfrutar el reino de Dios en esta tierra, es el afán que tenemos para las cosas materiales. A ese obstáculo debemos echarlo fuera. Es una gran montaña que no nos deja ver el reino de Dios.

1. Jesús quiere que no nos afanemos
Por eso Jesús dijo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir.

El afán es de hacer mas allá de lo que debemos hacer. Es preocupación por cosas que causan ansiedad, tensión, presión, Cambio de ánimo o de carácter.

Hemos perdido el contentamiento con lo que Dios nos da. El afán lleva al hombre a hacer cosas en contra de la moral. No importa trabajar bajo la mesa aún recibiendo prestaciones sociales del gobierno que lo impiden, para otros no importa robar, matar o hasta engañar los que le aman. El satisfacer su propio deseo, sus anhelos que calmarán sus ansias.

2. Jesús quiere que busquemos su reino
El segundo verso de introducción remarca las palabras de impacto que tienen la llave del éxito: Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.

Muchos buscan a Dios como una alternativa en su momento de crisis. Sin embargo el texto bíblico indica que esa búsqueda debe ser antes que todo. La palabra primeramente implica que los que vivimos bajo el señorío de Cristo busca la voluntad de Dios ante toda decisión. Busca el rostro de Dios, se deleita, se regocija en Dios ante toda cosa.

Este verso es como si Jesús nos dijera vive bajo mi voluntad. No busques las añadiduras porque si vivimos bajo la voluntad de Dios no faltaremos de nada.

En cierta ocasión el evangelista Lucas registra una historia donde un hombre se le acercó a Cristo pidiendole que convenciera a su hermano de ceder su parte de la herencia. Está frente al dador de la vida y su preocupación es su herencia. Cristo tuvo que replicarle que no había venido a ser repartirdor de bienes terrestres. La misión de Cristo y de su reino es venir a darnos vida eterna, felicidad eterna. La raíz del afán es la Avaricia.

Si vemos la vida de Elvis Presley, quién Dios le dio su talento en una iglesia y comenzó a desarrollarse como ministro de alabanza, pero tuvo en poco lo que Dios le dio y quizo mas.

Un periodista le preguntó un día. Dime que deseas en la vida:
  1. Quiero ser rico
  2. Quiero ser célebre
  3. Quiero ser feliz

Luego de vario tiempo, el mismo periodista le preguntó, ahora que eres célebre y rico, eres feliz? Elvis respondió: Lo he alcanzado todo, pero me siento solo e infeliz, como un condenado al infierno.

Hemos tenido la oportunidad de escuchar el testimonio de Hector Delgado, antiguamente “El Father”, quién tenía todo lo que un jóven desea, pero había un gran vacío en su corazón. Ese vacío solo lo puede llenar Cristo. Es que la vida del hombre no consiste en la abundancia de los bienes que posee.

Cuando vivía en El Salvador, uno de mis primos me mandó una fotos de un auto Mustang y juntos a las fotos una nota que decía ¿Cuando en El Salvador podrás comprarte un auto como este? En mi corazón se despertó el deseo de ir a Canadá para hacer dinero. Sin embargo, en cierta ocasión, asistí a una vigília unida donde tenía que llevar la dirección de alabanza. Al terminar el devocional, una hermana de otra iglesia que no conocía, se me acercó y me dio este pasaje:
23 Cuando te sientes a comer con algún señor,
Considera bien lo que está delante de ti,
Y pon cuchillo a tu garganta,
Si tienes gran apetito.
No codicies sus manjares delicados,
Porque es pan engañoso.
No te afanes por hacerte rico;
Sé prudente, y desiste.
¿Has de poner tus ojos en las riquezas, siendo ningunas?
Porque se harán alas
Como alas de águila, y volarán al cielo.
No comas pan con el avaro,
Ni codicies sus manjares;
Porque cual es su pensamiento en su corazón, tal es él.
Come y bebe, te dirá;
Mas su corazón no está contigo.
Proverbios 23:1-7

Los motivos de mi venida no tenían que estar centralizados en el gane material, sino mas bien el propósito de un hijo de Dios que le es menester estar en los negocios de su padre celestial. Dios uso el conflcito en mi país para que saliera, pero ya no motivado por el dinero, sino simplemente en salvar mi vida y la de mi familia.

Cuando llegué a Canadá, país donde fluye leche y miel. Pero Dios me recordó por la voz de los evangelistas Carlos Angúlo y Ramón Padín: Has venido a vivir por fe. Duras palabras que me recordaron que mi propósito a venir a este país no era para buscar la materia, sino de expandir el reino de Dios y su justicia.

La esperanza del cristiano es de entrar a la morada eterna, cuando escúchemos decir: venid benditos de mi padre, entren al gozo de su Señor.

Dios está atento al clamor de sus hijos. Cual sea tu dificultad recuerda que Dios tiene cuidado de ti. Nuestra familia misma, ya no es la filial, la de la sangre terrenal, sino como Cristo mismo dijo: Mi madre y mis hermanos son los que oyen la palabra de Dios, y la hacen.

Nosotros debemos liberar nuestro corazón de todo afán. Debemos aprender a depender de Dios. Nuestra seguridad y confianza debe estar en aquel que gobierna este reino, quien gobierna mi vida. Cristo Jesús, Rey de reyes y Señor de señores jamás nos dejará en vergüenza.

3. ¿Donde debemos comenzar el desojamiento del afán y la búsqueda del Reino de Dios?
Vayámos a Juan 3, a la historia de Jesús y Nicodemos. El maestro le dijo a Nicodemos que tenía que nacer de nuevo. Esto implica un cambio de mentalidad. Mismo si estás en una prueba financiera y la cajera se equivoca, lo justo y las reglas del reino es de devolverle y rectificarle su error. Dios no hace milagros dañando a otros. Dios es suficiente para hacer milagros creativos y proveyendote sin dejar en mal o en problemas de otros. El Reino de Dios es de justicia, de honestidad. Dios te da aún mas de lo que pides.

Nacer de nuevo es despojarnos de toda carnalidad, de toda mundanilidad.

1) Se establece una relación estrecha con el Señor.
Mis ojos pondré en los fieles de la tierra, para que estén conmigo;
El que ande en el camino de la perfección, éste me servirá.
Salmo 101:6

2) Ver y entender las cosas espirituales y los misterios de Dios
3) Para conocer y experimentar el poder milagroso de Cristo, para vivir de nuestros propios testimonios y no el de los demás.

Para despojarnos de todo afán debemos aprender a confiar en Dios.
Gustad, y ved que es bueno Jehová;
Dichoso el hombre que confía en él.
Temed a Jehová, vosotros sus santos,
Pues nada falta a los que le temen.
10 Los leoncillos necesitan, y tienen hambre;
Pero los que buscan a Jehová no tendrán falta de ningún bien.
Salmo 34:8-10

Dios tiene cuidado de nosotros. En todo momento Dios suple nuestra necesidades. El te ama y está pendiente de tu vida.
25 Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?
26 Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas?
27 ¿Y quién de vosotros podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo?
28 Y por el vestido, ¿por qué os afanáis? Considerad los lirios del campo, cómo crecen: no trabajan ni hilan;
29 pero os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió así como uno de ellos.
30 Y si la hierba del campo que hoy es, y mañana se echa en el horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más a vosotros, hombres de poca fe?
31 No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos?
32 Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas.
33 Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.
34 Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal.
Mateo 6:25-33

domingo, 15 de septiembre de 2013

El encuentro que cambia vidas

11 Aconteció después, que él iba a la ciudad que se llama Naín, e iban con él muchos de sus discípulos, y una gran multitud.
12 Cuando llegó cerca de la puerta de la ciudad, he aquí que llevaban a enterrar a un difunto, hijo único de su madre, la cual era viuda; y había con ella mucha gente de la ciudad.
13 Y cuando el Señor la vio, se compadeció de ella, y le dijo: No llores.
14 Y acercándose, tocó el féretro; y los que lo llevaban se detuvieron. Y dijo: Joven, a ti te digo, levántate.
15 Entonces se incorporó el que había muerto, y comenzó a hablar. Y lo dio a su madre.

Lucas 7:11-15
Hay momentos en la vida, momentos de crisis que necesitamos la ayuda de alguien. Momentos en los que nos sentimos turbados, donde nos sentimos desamparados, donde nos sentimos solos

La Biblia nos muestra casos de personas que tuvieron un encuentro que cambió sus vidas. El libro de Lucas remarca muchos encuentros que fueron determinante en la vida de personas que estaban en medio de un momento de crisis.

Una de esas historias es la que tomamos el día. En cierta ocasión en la ciudad de Naín, había una viuda ya avanzada de edad a quién se le acababa de morir su único hijo. En el Israel del tiempo de Cristo, no había una red social que protegiera a personas sin recursos como esa viuda que estaba totalmente desamparada. Junto al cadáver de su hijo iba a enterrar sus esperanzas, su protección, su sostén para sus últimos días. En ese entierro, le acompañaban una multitud de su ciudad, pero ninguno de ellos tenía el poder de cambiar su situación. Al limite podrían llorar junto a ella.

Sin embargo, dichosamente ese día iba entrando Jesús. Un encuentro casual para la viuda, pero un encuentro determinado en la eternidad por Jesús quién estaba allí para hacer un cambio radical en la viuda de esta viuda.

Jesús vio la mujer
El verso 13 recalca que Jesús vio a esa mujer en medio de un gran grupo de personas. Así, cuando tu y yo estamos en un moemtno de crisis, Dios pone sus ojos en ti y te encamina tus pies a la casa de Dios porque hay un plan para tu vida. Poco importa cuanl sea la situación que vivas, Dios no pasa por alto la necesidad de sus hijos. Lo peculiar y singular de Cristo es que el no solo te ve y ve tu problema, sino que tiene el poder para solucionar tu problema.

Tuvo compasión de ella
El corazón de Cristo se comovido a misericordia. Jesús no interrogó a la viuda, ni busco si era en consecuencia de un peccado que su hijo murió. El corazón de Cristo va mucho mas allá de las consideraciones humanas y ve una alma en necesidad y se acera para tener un encuentro que cambia la situación de lamento en llanto. Jesús consoló a la mujer. Se compadeció de la viuda y propuso en su corazón cambiar el lloro de esa mujer en un gozo pleno devolviendole sus esperanzas.

Un toque y una palabra de poder
Cuando Jesús abre su boca y viene a tocar tu vida es porque va hacer un milagro, va ha cambiar radicalmente tu situación. Independientemente que las leyes nazareas prohibian tocar cuerpo muerto, Jesús tocó el feretro abrió su boca y dijo con una palabra de autoridad: Jóven a ti te digo levántate. E inmediatamente el joven se reincorporó y se sentó. No fue ningun nervio o aire que hizo que el jovene se moviera, sino que Lucas registra que el joven comenzó a hablar.

Imagínate esa madre viendo su hijo volviendo a la vida. El joven no fue a su madre, sino que Jesús, Él mismo, lo entregó a su madre, como diciéndole, mujer he aquí te devuelvo tus esperanzas, aquí quito tu lamento en alegría, aquí cambio radicalmente tu vida. Ese encuentro cambió la vida de la viuda de Naín.

La enseñanza de hoy se divide en tres aspectos importantes:

1. Hay alguien aue está viendo tu dolor
18 He aquí el ojo de Jehová sobre los que le temen,

Sobre los que esperan en su misericordia,
Salmos 33:18

Dios mira tu dolor, no para juzgarte, sino para ayudarte, para solucionar tu problema. Él está dispuesto a ayudarte. Aunque andemos por la calle como el payaso que anda por la calle con una sonrisa en la boca, pero por dentro nos estamos muriendo, hay alguién que ve la intimidad de nuestro corazón y pone su mirada sobre sobre nosotros para tener misericordia de nosotros. En vez de llorar a solas, ven a recostarte en el pecho de tu Señor. Búsca ese encuentro con tu Dios, orando, leyendo sus escrituras, congregandote, ayunando, viniendo al lugar secreto donde solo estás tu y Dios.

2. Hay alguien que tiene compasión de ty quiere consolarte
10 No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.
13 Porque yo Jehová soy tu Dios, quien te sostiene de tu mano derecha, y te dice: No temas, yo te ayudo.

Isaías 41:10, 13

No temas, porque el Dios justo, el Dios compasivo, el Dios de poder, el Dios que nos da las fuerzas para continuar, que está dispuesto a ayudarte en todo tiempo, Él tiene los recursos ilimitados, Él es quien tiene su señorío e la tierra, en los cielos, debajo de la tierra. Dios está dispuesto a ayudarnos y su ayuda nunca es a medias. Él nos toma con seguridad en su mano.

3. Hay alguien en quien debes confiar, un toque de su mano y una palabra de poder es suficiente.
33 Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.

Juan 16:33

Basta una sola palabra de poder para cambiar tu vida. Si estas leyendo este sermón Dios te dice: A ti te digo levántate. Pónte sobre tus pies, porque Dios está aquí dispuesto a cambiar tu vida. Confía, solo confía.

6 Esforzaos y cobrad ánimo; no temáis, ni tengáis miedo de ellos, porque Jehová tu Dios es el que va contigo; no te dejará, ni te desamparará.

Deuteronomio 31:6

Tu confianza se refleja en esforzarte y cobrar ánimos. Dejar el temor de lado, porque quién está contigo es el Dios creador del cielo y la tierra. Él no te dejará en ningun momento, aun cuando creas que no puedes salir de allí, Dios no te abandonará.

Jesús ha salido a tu encuentro y quiere cambiar tu vida

domingo, 8 de septiembre de 2013

El proceso del Cristiano

Mas la senda de los justos es como la luz de la aurora,
Que va en aumento hasta que el día es perfecto.
Proverbios 4:18

Se ha dicho que todo lo que nace, crece, se desarolla. Tanto las plantas, como todos los seres vivientes, tienen un proceso de desarrollo. Así un bébé que nace, se convierte en niño, luego en adolescente, en joven, en adulto, en anciano hasta llegar a la gloria, todos aquellos que han recibido al Señor en su corazón.

Un procesos es una acción de llevar adelante y desarrollar algo. En el día de hoy deseamos reflexionar en ese caminar, en ese desarrollo, en ese procesos que nos lleva a la madurez espiritual. Deben operarse en nosotros cambios, desarrollos, un crecimiento natural y saludable para nuestra vida espiritual.

Es deber de cada uno de nosotros permitir ese proceso en nuestras vidas. Efesios 4:13, nos dice que esto debe ser hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe. Podemos pasar años sentados en una congregación sin permitir ese desarrollo y hay un estancamiento en la práctica cristiana, en el propósito de Dios en nuestra vida. Sigue ese verso de Efesios, diciendo hasta que lleguemos al conocimiento de Dios. Al no permitir que esos cambios propios al proceso del cristiano, muchos no hemos conocido al hijo de Dios, ni su palabra, por eso cualquier situación de la vida nos hace volver atrás, volver a recoger todo de lo que Dios nos ha limpiado, liberado, prácticas que no corresponden a los que caminan en la vereda de Dios.

Dios desea que lleguemos a la altura de nuestro Señor Jesucrito. Esto significa, no de una perfección absoluta, sino que desarrollemos en nosotros el carácter de Cristo.

El profeta Jeremías nos compara con una vasíja hermosa admirada por todos, pero para llegar a ser hermosa tuvo un proceso para ser formada. En primer lugar se escoge la buena arcilla y luego se limpia de toda piedra o cuerpo extraño que puede dañar el producto final. Así Dios nos limpia de hábitos, de pensamientos, de palabras, de comportamientos, de malicia, de vicios, en fin, Dios el alfarero nos purifica para poder ser una arcilla perfecta.

Luego el alfarero le pone agua, semejante a la palabra de Dios, para asuavisar, para que el barro sea maleable para ser formado en la rueda. Luego de haber dado forma, debe pasar por una ultima etapa dolorosa, la vasija debe pasar por el fuego, para fijar, para que la vasija tome la fortaleza necesaria.

Nosotros debemos tomar ejemplo de Cristo, una vasija de honra, que siendo Dios, se sometió a un proceso doloroso por amor a ti y a mi. Por eso dice filipenses dos, se le dio un nombre sobre todo nombre, del cual toda rodilla se doblará y toda lengua confesará que Jesucristo es el Señor.

Para poder llegar a ser imitadores de Cristo, debemos meditar un su sublime carácter. Cristo fue integro. En el fuego de la prueba tres veces compartió como se sentía en la prueba, el peso moral y espiritual que sentía sobre Él. Los evangelios registran como su sudor se convertía en gotas de sangre, como en el Getsemaní se expresa al Padre pidiendole que pasara, si posible, de Él ese tormento. Pero que no fuese como Él quería sino tal cual era la voluntad del Padre.

En la prueba debemos recordar que nuestro destino es de brillar, debemos ser como la luz de la aurora que va en aumento hasta que el día es perfecto.

La Biblia divide las personas en tres grupos. El enfoque de hoy es que podamos ver como en nuestra vida hemos pasado por los tres grupos o si nos hemos estancados en el proceso. No avanzamos, no crecemos, hablamos siempre de lo mismo, nuestra forma de pensamiento es la misma.

Primer grupo: El hombre Natural
Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente.
1a de Corintios 2:14

Esta es la persona no regenerada. Vive lejos del área espíritual y por ende no conoce a Dios, no aprecia el evangelio. Para Él las cosas del Espíritu le parecen locura, no entiende las cosas del Espíritu. El ayuno le parece algo ilógico, el mover del Espíritu Santo en lenguas o danza le parece desorden, no entiende porque el vestir del cristiano debe ser distinto, puro, honesto y santo. Su interés son los valores terrenos, los placeres de la carne, el dinero, la fama, el no someterse a nadie.

Sin embargo, todo puede cambiar cuando uno se encuentra con el caballero de la cruz. Allí debuta el proceso. Nadie nace aprendido. Las aptitudes cognitivas, motrices y verbales deben ser desarrolladas en el niño, sino se convierte en una persona dependiente e incapacitada, aunque tiene las facultades para poder desarrollarse. Es un proceso de aprendizaje. Así, todo aquel que es llamado por Dios y

Segundo grupo: El hombre Carnal
 De manera que yo, hermanos, no pude hablaros como a espirituales, sino como a carnales, como a niños en Cristo.
Os di a beber leche, y no vianda; porque aún no erais capaces, ni sois capaces todavía,
porque aún sois carnales; pues habiendo entre vosotros celos, contiendas y disensiones, ¿no sois carnales, y andáis como hombres?
Porque diciendo el uno: Yo ciertamente soy de Pablo; y el otro: Yo soy de Apolos, ¿no sois carnales?
¿Qué, pues, es Pablo, y qué es Apolos? Servidores por medio de los cuales habéis creído; y eso según lo que a cada uno concedió el Señor.
Yo planté, Apolos regó; pero el crecimiento lo ha dado Dios.
Así que ni el que planta es algo, ni el que riega, sino Dios, que da el crecimiento.
Y el que planta y el que riega son una misma cosa; aunque cada uno recibirá su recompensa conforme a su labor.
1a de Corintios 3:1-8

Esto es cuando tenemos conocimiento superficial de Cristo, pero también tenemos reacciones y comportamientos del hombre natural. Así como Nicodemo, un relgioso a quién Jesús le dijo que era necesario nacer de nuevo. Pablo le escribe a los corintios quienes, a pesar de ser llenos del poder de Dios, habían saltado etapas del proceso. La iglesia de Corinto es simbolo de la iglesia pentecostal moderna, llena del poder del Espíritu Santo pero en desorden. Personas que creyendo que poque habían hablado en lenguas se creían ministros, superiores. Por eso habían celos entre ellos, contiendas y hasta pecados deshonrosos.

Debemos de estar concientes que estamos en un proceso y no podemos quedarnos estancados en esta etapa. Podemos usa una palabra de autoridad y decirle al diablo BASTA! Debemos de desarrollar, porque mientras estamos allí Dios no puede cumplir su propósito en nosotros.

Imáginate si al orar un carnal Dios hace un milagro, se inflará de orgullo y se robará la gloria que solo le pertenece a Dios. Cuando impones manos, cuando oras por alguién, cuando predicas u ofreces cualquier servicio, debemos darle TODA la gloria a Dios. Aprender a ser humildes y de reconocer que así como cuando Cristo entró por la ciudad y le alababan, le saludaban con palmas y decían Hosanna al hijo de David, toda esa alabanza del pueblo era para el que iba sobre el pollino, no era para el pollino. Nosotros, debemos sentirnos privilegiados de ser canales de bendición, de ser instrumentos para su gloria, pero no gloriarnos en la carne, creernos lo que no somos. La palabra siervo significa el que sirve. En la modernidad, muchos usan ese vocablo para muchos ser servidos y puesto en lo alto. La gloria siempre y únicamente debe ser para Jesús!

El hombre carnal es el que no le tiene respeto a las autoridades espirituales, no le tiene respeto a sus compañeros de milicia, es aquel que desea que el mundo gire alrededor de él. Es rápido para hablar, para criticar, para murmurar, para juzgar. Se comporta como niño. Cuando las cosas no se hacen como él desea se encapricha y simplemente decide de abandonar el redíl o en medio de la prueba busca recursos en todas partes primero, en vez de venir a los pies de Cristo y depositar su carga a los pies de la cruz.

Tercer grupo: El hombre Espiritual
15 En cambio el espiritual juzga todas las cosas; pero él no es juzgado de nadie.
16 Porque ¿quién conoció la mente del Señor? ¿Quién le instruirá? Mas nosotros tenemos la mente de Cristo.
1a de Corintios 2:15-16

La cima del proceso es el hombre espiritual. Este es el que juzga todas las cosas. Ojo, no dice juzga a los demás, sino que juzga todas las cosas. De detiene a reflexionar, a analizar, a pensar antes de hablar. No se presta a las trampas, a los lazos que el enemigo le tiende. Analiza si va a edificar, a levantar o a destruir con sus palabras, con sus hechos.

Este se encontró con Cristo, nació de nuevo por la palabra, es guiado por el Espíritu Santo y es libre toda inclinación sectaria. El espíritual trabaja en pro de la obra del Señor. Que si uno se pierde por causa de nuestra indolencia, la sangre de ese será sobre nuestra cabeza. Hace cuidado donde pone su pie, a que presta su oído, donde pone sus ojos.

El espiritual es como un cedro del líbano, como un árbol plantado junto a corrientes de aguas que da su fruto en su tiempo y su hoja no cae. Dios te trajo a esta ciudad para ser puente de salvación en una sociedad llena de corrupción. El hombre espiritual piensa con la mente de Cristo. Amor sin límites, miesricordia eterna y pasión hasta la muerte.

¿Como puedo permitir que este proceso se realice en mi vida?
  1. Escudriñar la palabra – Juan 5:39
  2. Llevar una vida de oración – Mateo 26:41
  3. Practicar el ayuno – Mateo 17:21
  4. Congregarse – Hebreos 10:25
  5. Seguir la dirección del Espíritu Santo – Juan 16:13

Entra en el proceso y lograrás alcanzar el propósito de Dios para tu vida.

¿En que etapa del proceso estás?